Apreciar los diferentes botánicos empleados en la elaboración de las ginebras premium es fundamental para que este maravilloso caldo nos revele todos los matices. Con una cata podemos descubrir aromas y sabores que pasan inadvertidos habitualmente, a la vez que percibimos las diferencias entre las ginebras de gama alta y las de menos calidad. Nuestra London Dry Gin destaca sobre el resto y, mediante una cata bien organizada podremos coronarla como la reina entre las reinas de las premium.
Vones Gin os introduce en el mundo de la cata de la ginebra y os da pautas básicas para llevar a buen fin esta práctica y, convertirte, paso a paso, en un catador exigente. Después de realizar una cata en condiciones nunca aceptarás un “no” por respuesta cuando pidas nuestra London Dry Gin.
Organizar una cata de ginebra
Para organizar una cata de ginebra lo primero que debemos hacer es seleccionar las ginebras premium que queremos incluir en ella, a fin de compararlas y descubrir las diferencias. Lo ideal es contar con un espectro de ginebras que empleen diferentes botánicos. De esta forma aprenderemos a percibir los matices diferenciadores de cada una y a decantarnos por una u otra.
Incluir una ginebra de baja calidad en la cata nos ayudará a descubrir el porqué de diferencia de calidad, lo que desnivelará la balanza definitivamente por una ginebra premium como nuestra London Dry Gin.
La temperatura ideal de cata es 9 grados centígrados, por lo que nuestra selección de ginebras deberá estar acondicionada a esta temperatura previamente. Almacenarla con anterioridad en una cava sería lo ideal para marcar la temperatura de servicio de cara a la cata.
Necesitaremos copas de vino pequeñas, de cristal fino y de buena calidad. Estas copas son ideales debido a que atrapan los aromas en su interior de forma idónea gracias a su terminación curva. Estas copas nos permiten mover la ginebra sin calentarla, ya que su cuello nos otorga la posibilidad de girar la copa sin tocar el cristal que envuelve nuestro preciado caldo.
Por último, necesitamos agua mineral sin gas, un agua de calidad y de alta pureza, para no enmascarar el sabor de la ginebra y ayudarnos a liberar todo el abanico de aromas presentes en nuestra premium. La ausencia de gas, por su parte, se debe a que este podría confundirnos en la búsqueda de la personalidad de la ginebra, además de desdibujar el resultado final de la cata. La temperatura del agua debe ser la misma que la de la ginebra, por lo que si disponemos de cava, la incluiremos junto a nuestra selección de premiums.
Pasos a seguir durante la cata
En una cata de ginebra intervienen diferentes sentidos, la vista, el olfato y el gusto. Para realizar la cata en óptimas condiciones es fundamental no estar resfriado, ya que nuestras percepciones se verán condicionadas e infaustamente mermadas.
Para comenzar servimos 3 cl de ginebra en la copa de vino, añadiendo a continuación la misma cantidad de nuestra agua sin gas. Rotamos levemente la copa para ligar bien ambos líquidos.
Los diferentes botánicos empleados en la elaboración de las ginebras premium les otorgan un primer matiz que debemos descubrir: el color. Mediante la cata podremos ver colores presentes en las ginebras que de otra forma no percibimos (salvo aquellas que son muy llamativas). Elevando la copa a contraluz y girándola suavemente veremos el color que le otorga el botánico a la ginebra.
El segundo paso de la cata es percibir los matices olfativos que desprende la ginebra premium. El agua y la copa cobran especial importancia en esta fase. El agua potencia la liberación de aromas, mientras que la copa seleccionada nos permite retenerlos. Tras girar varias veces la copa para oxigenar el contenido, aspiramos profundamente por la nariz para percibir y descubrir las múltiples fragancias que desprende nuestra ginebra, que tenemos en estado puro en nuestra copa. Indefensa, pero dispuesta a descubrirnos su potencial. Podremos percibir los aromas cítricos, florales, especias… todo un mundo olfativo a nuestro alcance. En este punto hay que destacar que si percibimos sustancias químicas habremos descubierto una ginebra de baja calidad.
Con respecto a la temperatura, es fundamental que no se caliente la ginebra durante el proceso de cata, y especialmente en este punto, ya que en ese caso se liberaría el alcohol y nos entorpecería la labor olfativa, malogrando los resultados fidedignos de nuestra cata de ginebra.
El tercer y último paso de la cata es saborear la ginebra. El primer sorbo debemos de moverlo alrededor de la boca y dejarlo reposar unos segundos sobre nuestra lengua. En esta primera toma de contacto debemos descubrir la esencia primaria y artífice de esta bebida, el enebro. A continuación empezaremos a notar la explosión de botánicos presentes en la ginebra premium objeto de cata.
Para pasar a realizar otra cata, debemos enjuagarnos bien la boca con agua antes de comenzar un nuevo proceso de degustación.
Como siempre, os recordamos que el consumo de alcohol debe ser responsable, lo que nos garantizará una experiencia satisfactoria y segura.